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«Fue desarmada en dos maletas»: artista chileno detalla proceso de su polémica estatua del rey emérito Juan Carlos I de España

País ADN conversó con el artista autor de esta intervención, Nicolás Miranda, quien afirmó estar sorprendido por el impacto de la obra, considerando que estuvo en el lugar solo 10 minutos. 

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«Fue desarmada en dos maletas»: artista chileno detalla proceso de su polémica estatua del rey emérito Juan Carlos I de España

Debate internacional generó el artista chileno Nicolás Miranda, tras instalar ante el clásico monumento del Oso y el Madroño en la plaza Puerta del Sol, en Madrid, España, una estatua del rey emérito Juan Carlos I. 

En la propuesta, el exmonarca apuntaba con un rifle de caza a dicho animal, generando polémica en el país europeo y en redes sociales. 

A raíz de esta intervención artística, este martes, País ADN conversó con Nicolás Miranda, quien afirmó estar sorprendido por el impacto de la obra, considerando que estuvo en el lugar solo 10 minutos. 

“Fue un operativo en realidad, o sea, lo estábamos planeando hace un año más o menos, y claro, construimos la estatua del emérito de tal manera que todas las piezas pudieran calzar y ser pegadas acá en Madrid”, detalló el artista nacional. 

“Fue desarmado en dos maletas. Es de poliuretano, plumavit en el fondo, que es uno de los conceptos que instalo o desde donde trabajo, camuflar y acoplar a un contexto determinado y para eso tenía que justamente parecer bronce”, aclaró el chileno. 

«Un proceso lento»

Consultado por el proceso de preparación para llevar a cabo esta intervención, Nicolás Miranda expuso que se logró “con harto tiempo libre”. 

“Fue un proceso lento. Desde Santiago, por ejemplo, yo me asesoré con un abogado, y se empezó a armar el equipo de trabajo, y por ejemplo, yo revisaba las cámaras que hay, para ver el flujo de gente, el tipo de luz, y a ver si se veían las rondas policiales”, puntualizó. 

“Ahora, ya in situ, llevamos las piezas, el pedestal, yo al emérito, y dos amigos, que iban adelante, nos iban avisando si habían, por ejemplo, policías en el metro y otros que estaban esperando en sol, avisando si estaban dando justo la ronda por el lado del oso”, continuó narrando el artista. 

Repercusiones

Respecto a las repercusiones de su obra, que incluso fue catalogada como una imbecilidad absoluta por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, Miranda señaló: “No sé si existe la imbecilidad a medias”. 

“Primero no se dieron cuenta, después, se arma este típico círculo, aparecen cámaras, y posterior a eso, (aparece) gente, claro, a favor de la defensa de los animales, que yo tampoco soy animalista ni antianimalista (…) ahí salieron algunos monárquicos, pero mucho apoyo de todas maneras”, agregó. 

En la Puerta del Sol estuvo (la estatua) 10 minutos, nosotros teníamos un mínimo de 2 minutos, de hecho los fotógrafos que trabajaron decían que con uno ya estaban, y un poco lo que decía: ¿Cómo una acción así, en tan poco rato, se expande de tal manera?”, sumó al artista chileno. 

“Yo pensaba que podía pasar algo, pero no tanto, o sea, desapercibido yo sabía que no iba a pasar”, cerró Nicolás Miranda. 

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