¿Los comerías? Unión Europea autoriza dos insectos para el consumo humano

¿Comerías gusanos o larvas en vez de pollo? Los ciudadanos europeos pronto podrán hacerlo, y es que la Unión Europea acaba de autorizar dos insectos para el consumo humano.

Se trata de los gusanos de la harina -una especie de escarabajo negro brillante- y los grillos domésticos, que ya podrán venderse como alimento, según DW.

Las larvas pueden venderse en polvo, pasta, secas y congeladas, mientras que los grillos pueden comercializarse en polvo parcialmente desgrasado.

Los beneficios de consumir insectos

Actualmente, los alimentos que contienen insectos ya se venden en los supermercados del Reino Unido, los Países Bajos, Bélgica y Dinamarca, como una nueva alternativa alimenticia que ofrece la misma cantidad de proteínas, vitaminas y minerales que el pescado o la carne.

Según Retaildetail.eu, la UE ha declarado que los fabricantes deben declarar debidamente tales ingredientes en los envases de los alimentos.

La UE afirma que su decisión «contribuye positivamente al medio ambiente y a la salud y los medios de subsistencia».

De todas formas, para calmar a los más asustadizos, la Comisión Europea tuiteó la semana pasada que «nadie se verá obligado a comer insectos».

Un cambio de hábitos

Aunque más de 2.500 millones de personas consumen insectos a diario, no es una práctica que haya calado en las naciones occidentales. Pero los expertos esperan que «con el tiempo y la exposición, esas actitudes puedan cambiar».

«Hay razones cognitivas derivadas de nuestras experiencias sociales y culturales, el llamado ‘factor asco’, que hacen que la idea de comer insectos resulte repelente para muchos europeos», explica a Politico Giovanni Sogari, investigador social y de consumo de la Universidad de Parma.

Según Politico, los gusanos de la harina saben «muy parecido al maní». Se pueden salar, mojar en chocolate, espolvorear sobre ensaladas o incluso añadir a sopas, según el sitio web.

La ONU lleva haciendo campaña para que la gente consuma insectos para hacer frente a la «inseguridad alimentaria» desde que publicó su informe de 2013 Insectos comestibles.