Pobres criaturas: cómo es la aclamada película que reúne a Emma Stone, Willem Dafoe y Mark Ruffalo

La edición actualmente en curso del Festival de Cine de Venecia trajo consigo por lo menos un par de películas a tener en cuenta. Claro que entre las decenas de cintas, Pobre Criaturas de Yorgos Lanthimos es una que se ha destacado por encima del resto.

No es menor. La ficción reúne a nombres tan reconocibles como Emma Stone, Willem Dafoe y Mark Ruffalo. Todo para concretar una reunión surrealista bajo la óptica del cineasta griego, quien adaptó la trama de un libro publicado en 1922.

La historia sigue precisamente a Bella Baxter. Una protagonista que vuelve a la vida gracias al doctor Godwin Baxter (Dafoe) y que debe aprender a cómo incorporarse nuevamente a su cuerpo y a la rutina. Una proyecto que ronda entre la comedia usual del realizador y que también plantea el diálogo en torno a la libertad femenina.

Por lo demás, se trata de un trabajo que gracias al veredicto de la crítica especializada, que ya la ha visto, se mantiene imbatible en términos de puntuaciones perfectas. Todo esto también desplegando una especie de remake a la historia de Frankenstein.

Qué dice la crítica de Pobres Criaturas

A ojos de The Hollywood Reporter, se trataría de una película: «llena de delicias groseras, ingenio vivaz, fantasía radical y elementos de diseño impresionantes». Claro que el medio también se expande a elogiar a su protagonista. 

«El hecho de que la película siga siendo ingeniosa y sabia en sus tramos más espeluznantes hace que la candidata al León de Oro de Venecia sea uno de los más reconfortantes del año«, definió por su parte The Wrap, apuntando a sus chances de éxito en el certamen.  

Una serie de definiciones que también tienen su respaldo en otra instancia evaluativa: Pobres Criaturas debutó con un 100% de aprobación en Rotten Tomatoes.

Se trata de un nuevo proyecto de la mente detrás de otros como Langosta, El sacrificio del ciervo sagrado y La favorita. Un historial altamente laureado que se cimenta aún más con la aventura de Stone, con quien ya había trabajado previamente.

Claro que en paralelo al fenómeno también corrió El Conde de Pablo Larraín. El bastión chileno en la competencia que se centra en un Augusto Pinochet vampiro. Un proyecto que supone la décima aventura del realizador tras las cámaras y que fue ovacionado por cinco minutos tras su proyección en una de las salas italianas.