Colchones, sillones, un televisor y un refrigerador, entre otras cosas, fueron sacados por funcionarios de la Municipalidad de Santiago y carabineros de una cas tomada. El desalojo fue llevado a cabo la mañana de este miércoles 19 de julio.
En la vivienda, que se ubica en calle Chacabuco 443, Barrio Yungay, vivían 21 adultos y 5 niños. La casa tiene denuncias por fiestas clandestinas, tráfico de drogas y balaceras.
Según lo constatado por una vecina, el inmueble estaba ocupado ilegalmente desde 2017: «De ahí en adelante todo fue fiesta, balazos, peleas y para nosotros es no poder descansar». Además se refirió al desalojo: «Que el dueño se preocupe ahora de dejarlas bien cerradas, porque estas casas las desalojan, pero a la semana ya son vueltas a ser tomadas».
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Otra vecina recalcó que, tras el desalojo, podrán «vivir más tranquilos, dormir más tranquilos, va a ser todo bien para nosotros».
La alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, se comprometió con apoyar a las familias desalojadas que no tengan donde llegar, con hostal los primeros días y luego con un subsidio de arriendo. Por su parte, el ministerio de Desarrollo Social también proverá alternativas de albergue.
En los últimos tres meses la alcaldesa notifica que han recuperado 12 casas y han detenido a 20 personas que se encontraban con antecedentes. Además, añadió: «Hemos podido recuperar más de $59 millones en droga en distintas casas tomadas en estos 12 inmuebles».
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