«Operación Turquesa IV»: Interpol y PDI desbaratan red internacional de trata de personas

La Interpol (International Criminal Police Organization), junto a la Policía de Investigaciones (PDI), llevaron a cabo la «Operación Turquesa IV»: un trabajo internacional que apuntó al desbaratamiento de una red de trata de personas con fines de explotación sexual. En Chile, el trabajo fue nominado «Operación Lira».

Sergio Muñoz, director general de la policía civil, detalló que fueron más de 30 países en los que se coordinaron diferentes instituciones para ejecutar el procedimiento: «Vamos a analizar todos los aspectos a rescatar de las experiencias y operaciones que han permitido identificar a más de 260 personas involucradas en los delitos de tráfico de migrante, trata de personas, explotación sexual, y eso es lo más relevante que se puede destacar».

En Chile, la operación resultó en dos investigaciones iniciadas, «muy robustas, que tienen que ver con la trata de personas y el tráfico de migrantes, que están en desarrollo, con muy buenos resultados hasta el momento y creo que es lo que nos preocupa hasta el momento, no solo a nuestro país, sino a todo Sudamérica y todo el mundo», precisó Muñoz.

Por su parte, Salvador Briseño, representante de Interpol, destacó: «Cuando la PDI hace cosas en este país, ellos tienen alcance mundial».

«Las bandas criminales, transnacionales, no reconocen fronteras. Y nosotros, como policías, es necesario que no reconozcamos de qué país sea; cuando tengan alcance mundial, es el momento de preocuparse de los criminales», agregó luego.

Finalmente, el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, puso énfasis en dos aspectos: primero, en el reconocimiento de la Policía de Investigaciones dentro de las labores de la policía internacional; y segundo, el reconocimiento internacional que ha tenido el «Plan Microtráfico Cero», que apunta a desbaratar el mercado local de sustancias ilícitas.

La Operación Truquesa IV permitió el rescate de una víctima menor de edad y dos mayores, todas de nacionalidad venezolana, quienes fueron reasentadas en un tercer país de origen, tras las amenazas de muerte que recibieron por parte de miembros de la organización criminal. Esta misma organización está compuesta por alrededor de 10 sujetos, con diferentes roles.

Los avances investigativos dieron origen a la solicitud de seis órdenes de detención y entradas y registros de diferentes inmuebles en Región Metropolitana.