Ciudadano chileno en España denuncia encubrimiento de la Compañía de Jesús en caso de abuso sexual en su contra

Un ciudadano chileno que denuncia al jesuita Juan Miguel Leturia, por abusos sexuales, hace una semana presentó su caso ante la comisión del Defensor del Pueblo, instancia asesora con sede en España que lleva la investigación sobre estos ilícitos cometidos por clérigos.

Según consignó El País, la víctima acudió, en 2019, al obispado de Tarragona (España), donde vive actualmente, para denunciar a siete provinciales de la Compañía de Jesús de Chile y a 12 miembros de esa orden, por encubrir los abusos que sufrió en su infancia, ya admitidos y condenados por la Iglesia, o bien por no querer investigar posteriormente esa ocultación del delito.

También, acudió a los tribunales de Chile en el año 2021, en donde la investigación por encubrimiento sigue abierta. Hace una semana, la Secretaría de Estado del Vaticano también cuenta con su denuncia.

Condena en secreto

Tras la denuncia de la víctima, la Iglesia chilena condenó en 2006 a Juan Miguel Leturia, pero en secreto; sin informarle de nada. Una pena que consistió en apartar al cura del contacto con menores y dar misa durante tres años, sin embargo, no se juzgó el encubrimiento de quienes conocían sus abusos.

Y después de 15 años sigue sin hacerlo, en el que diversos responsables eclesiásticos, asegura la víctima, han continuado ignorando sus denuncias y respondiéndole con evasivas. Por lo que espera que el papa Francisco se preocupe realmente de escucharlo.

En total, acusa a 21 personas por haber mirado para otro lado durante años y desatender sus peticiones de justicia.

El provincial de los jesuitas en Chile, Guillermo Baranda, afirma que los hechos denunciados por la víctima se investigaron y se impuso una pena a Leturia que cumplió hasta su muerte. Y sobre los encubrimientos, señaló que “la Compañía de Jesús no tomará decisiones al respecto” hasta que la justicia de Chile se pronuncie, ya que “es la entidad competente”.

«Nos dijo que éramos sus elegidos»

David, nombre ficticio de la víctima, comenzó a sufrir de estos abusos en 1988, cuando tenía 13 años, mientras estudiaba en el colegio San Mateo de la Compañía de Jesús, en la comuna de Osorno. Allí, Leturia era director del centro y, junto con un compañero, comenzó a llevarlo a la rectoría. «Nos dijo que éramos sus elegidos«, relató la víctima.

Y en esas visitas abusaba de ellos. «Después de esos encuentros, me cruzaba por los pasillos con sacerdotes jesuitas de la comunidad, que posteriormente ocuparon los cargos de rector”, señaló David, quien asegura que ellos tenían que saber lo que pasaba.

Leturia abandonó temporalmente el centro al final de ese curso, en 1988. Después, en 1990, comenzó a escribirle cartas a David, quien tenía 15 años, y viajaba para visitarlo. Y, según la denuncia, en esos encuentros el pederasta siguió abusando de él, como de otros estudiantes.