Director del INTA sobre incremento en la desnutrición en Chile: «Claramente es un efecto de la pandemia»

El director del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos (INTA) de la Universidad de Chile, Francisco Pérez Bravo, se refirió a otro efecto de la crisis provocada por el coronavirus covid-19: la desnutrición.

«Pienso que claramente es un efecto de la pandemia«, comenzó sosteniendo en conversación con ADN Hoy.

Cabe destacar que el doctor en Ciencias Biológicas advirtió hace unos días que las consecuencias son profundas y dio cuenta no sólo del aumento de la obesidad, sino también de la aparición de «focos» de desnutrición en las familias vulnerables de Chile, una situación que no se registraba hace dos décadas.

Sobre el «estudio que se presentó el 25 de marzo pasado por la Junaeb con Elige vivir sano, que es el ‘Mapa nutricional 2020’, ahí aparece algunas cifras que son llamativas desde el punto de vista del incremento de la desnutrición. Creo que hay que poner mucha atención a los efectos durante la pandemia y post pandemia, tanto por la desnutrición como por la obesidad», señaló.

Asimismo, indicó: «Cuando uno mira este efecto de lo que llamamos ‘seguridad alimentaria’, que es la disponibilidad de alimentos en cualquier momento, con buen acceso físico, social y económico, y uno mira las cifras, que también liberó hace poco el Ministerio de Desarrollo Social con Elige vivir sano, que mostraban, por ejemplo, que la inseguridad alimentaria en los quintiles de bajos ingresos es del 25,6%, es decir, población en riesgo de tener una muy mala alimentación, incluso de no alimentarse en algunos casos, y este porcentaje baja al 3,9% cuando te vas a los quintiles de mayores ingresos«.

«Definitivamente esta es una crisis durante la pandemia, que tiene un foco muy claro que son los grupos más vulnerables y los ingresos socioeconómicos más bajos«, afirmó el bioquímico.

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«Cuando analizas los datos y te vas bajo la línea de la pobreza, posiblemente esta proliferación de sectores con ollas comunes se esté dando una situación de mayor vulnerabilidad en términos alimentarios, posiblemente hambre«, manifestó.

De igual forma, advirtió: «Es obvio que cuando hay deficiencias de micronutrientes, sobre todo en el extremo de la desnutrición, van a tener por lógica que aparecer alteraciones en desarrollo físico, cognitivo, probablemente muchos niños que están en este escenario de vulnerabilidad desde el punto de vista de una buena nutrición, vayan a tener en el futuro un mal rendimiento escolar y tal vez van a aparecer un poco los focos de menor potencia en lo que es respuesta y resistencia a infecciones. Estas poblaciones mal nutridas en algún momento gatilla alguna presentación con mayores patologías, obesidad, hipertensión, diabetes tipo 2«.

Comidas Junaeb en colegios

Por otra parte, Pérez precisó que cree que el dejar de recibir las comidas que ofrece la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) «ha influido en forma muy relevante».

«Este sistema de alimentación escolar está bastante bien diseñado, muy saludable. En muchos hogares de los niveles socioeconómicos bajos constituye la comida principal durante el día, y la ausencia de esto creo que por supuesto que se va a notar en el muy corto plazo si es esta pandemia y restricciones a niños y niñas de retorno al colegio se sigue prolongando», expresó.

Eso sí, el experto cree que el retorno a clases presenciales sería una «medida irresponsable» mientras no pase la pandemia, ni se estabilice el número de contagios, pero es posible «plantear franjas horarias, como se ha hecho incluso para la parte de recreación y deporte. Que niños puedan asistir a los colegios para obtener este beneficio que es muy clave en su desarrollo«, concluyó.