«Ni electricidad, ni comida, ni agua, ni gas»: Israel instaura el bloqueo total de la Franja de Gaza
Benjamín Netanyahu ordenó esta medida contra un territorio en el que viven más de dos millones de personas en condiciones gravemente precarias.
El conflicto entre Israel y Palestina, que comenzó con un ataque de Hamás contra el sur del territorio Israelí, está teniendo un alto costo humano en la Franja de Gaza. Un territorio palestino densamente poblado y que ya enfrenta condiciones precarias de vida. A medida que los bombardeos israelíes continúan sin cesar, el gobierno de Israel, bajo el liderazgo del primer ministro Netanyahu, ha decidido imponer un bloqueo total en la zona.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Galant, anunció el bloqueo total, afirmando que «estamos imponiendo un asedio total a Gaza«. Esto implica la restricción total de electricidad, alimentos, agua y gas hacia la región. Además, Galant hizo declaraciones controvertidas al expresó que «estamos luchando contra animales y actuamos en consecuencia«.
El conflicto ha llevado a una escalada significativa de la violencia en la región, con bombardeos israelíes continuos y el lanzamiento de cohetes desde Gaza. Hasta el momento, se informa que han muerto al menos 687 personas en Gaza, y se estima que mínimo la mitad de las víctimas son civiles, incluyendo mujeres y niños.
Mientras tanto, el número de fallecidos en Israel supera los 900. Además de que se informa que más de 100 personas están siendo retenidas por los milicianos de Hamás.
Las graves consecuencias humanitarias del bloqueo
El bloqueo de Israel tiene un impacto inmediato en la vida de los habitantes de Gaza. Y es que detiene todos los suministros que ingresan al territorio, incluyendo alimentos y medicinas. Esto, en una zona que ya se encuentra sumamente empobrecida.
El suministro de combustible se agotará en un plazo de 24 a 72 horas, según las autoridades. Y la escasez de combustible y electricidad agrava aún más la situación en los hospitales, que ya enfrentaban una grave escasez de medicamentos y suministros médicos.
Además, Gaza depende en gran medida de la ayuda humanitaria y las restricciones a la entrada de suministros esenciales amenazan la vida y la salud de los habitantes de la región. La situación en Gaza se caracteriza por la inseguridad alimentaria, las restricciones de movimiento y la escasez de agua. Y las medidas de bloqueo recientes solo empeoran estas condiciones precarias.
El Ministerio de Salud palestino solicitó a los actores internacionales que insten a Israel a restablecer las líneas eléctricas y proporcionar suministros de emergencia. Debido a que, medicamentos, combustible y generadores de energía, son fundamentales para satisfacer las necesidades críticas en Gaza.