Elecciones en España 2023: «La polarización lleva instalada desde hace muchos años, al igual que en el resto de Europa»

El próximo domingo 23 de julio los ciudadanos españoles votarán a las próximas diputadas y diputados, y también a quienes conformarán en Senado. La importancia está en que ambas cámaras definirán las políticas de los próximos cuatro años. Además, las diputadas o diputados elegirán a quien se convertirá en el futuro presidente del gobierno. 

Pablo Morán, jefe del área Internacional en la Cadena SER, habló de ADN Hoy del estado de las cosas allá: el adelantamiento de las elecciones, que en principio estaban programadas para diciembre, pudo haber elevado la expectación y la movilización de los votantes, por el «descalabro» que sufrió su partido, el Partido Socialista, en las elecciones de mayo pasado.

«(El adelanto) nos pilló por sorpresa, con los planes de verano cerrados o a punto de cerrar», explicó Morán. A ello se suma que los españoles «con un punto de desidia, pero la expectación y la movilización ha ido creciendo los últimos días de campaña».

Lo anterior se refleja en el aumento del voto por correo: este viernes se cierra el plazo para hacerlo y se inscribieron más de dos millones 600 mil personas, «que es prácticamente el doble de lo habitual».

 Polarización

Otro de los factores que influye en la escena política española es el avance de la ultraderecha, que, a juicio del periodista, «la polarización lleva instalada desde hace muchos años, al igual que en el resto de Europa».

«Lo que está en juego es si la ultraderecha que está instalada en el Congreso accede al Gobierno. No es la primera vez que esto pasa desde la dictadura franquista. Si atendemos a las últimas encuestas, hay opciones que eso ocurra: los conservadores representados por el Partido Popular tenían la mayoría al alcance de su mano, sumado a esos diputados de extrema derecha», agregó.

El candidato Alberto Núñez Feijóo, uno de los más populares, «ha sido pillado desplegando un rosario de argumentos falsos o engañosos en una entrevista en la TV estatal. Se le ha retratado como a un mentiroso. Falsedades que se volvieron virales en redes y que el partido no ha sabido atajar atacando a ese medio y a la periodista que la puso en aprietos».

Atacó a correos, «la empresa encargada de tramitar los votos: la derecha y ultraderecha ha tratado de sembrar dudas respecto a la eficacia de esos funcionarios». Pero en el último debate, Feijóo se ausentó y por su sector participó Santiago Abascal, quien «no estuvo a la altura de un tándem de izquierda que demostró solvencia y cierta complicidad».

Hacia el final, concluyó:

«Vimos, esta semana, al candidato Feijóo volviendo a mentir en cosas muy básicas: pensiones, sobre periodismo, sobre violencia de género (…) Ayer intentaba desacreditar los datos del paro: dijo que la ministra estaba maquillando las cifras, y que la ministra sabe mucho de maquillaje. Un comentario machista. Está aflorando todos los aspectos más negativos del candidato conservador, porque el cara a cara del candidato Sánchez sí que consiguió anular el candidato Feijóo a Sánchez y a medida que ha avanzado la campaña, se ha sufrido muchos reveses a esa euforia del principio, pero ahora parece que no es tan claro».