«Dios, patria y familia»: los principios de Hermanos de Italia, el partido de ultraderecha que arrasó en las elecciones
El fomento de la natalidad, restricciones migratorias y frenar la "violencia islamista" son los puntos principales de esta colectividad.
«Es el tiempo de la responsabilidad, gobernaremos para todos los italianos», fue una de las frases que dijo Giorgia Meloni, lideresa de la coalición de ultraderecha que ganó las elecciones generales en el país europeo, 77 años después de la era Mussolini.
Se trata de una coalición de conservadores, posfascistas y populistas, que tiene entre sus filas a Hermanos de Italia, Fratelli d’Italia en el idioma original. Este partido tiene como lema «Dios, patria y familia«, mensaje que data de 1931, cuyo autor es el secretario general del Partido Nacional Fascista, Giovanni Giurati.
Hermanos de Italia se suma al cordón ultraderechista en Europa, que tiene como principal figura a Vox, colectividad española que se instaló en los tres tercios. Otra figura es el primer ministro húngaro, Viktor Orbán.
El programa de los Fratelli d’Italia
Giorgia Meloni defendió durante la campaña los siguientes conceptos: «la familia natural», «la identidad sexual», «la cultura de la vida», «la universalidad de la cruz» y «las fronteras seguras». Por otro lado, rechaza los «los lobbys LGBT», «la identidad de género», «el abismo de la muerte», «la violencia islamista» y «la inmigración masiva». Los dos últimos son, por lo general, los argumentos basales de la ultraderecha europea.
Una de las prioridades de este partido es fomentar la natalidad. Para ello buscan la introducción de un régimen fiscal que tenga en cuenta el número de miembros de cada núcleo familiar, la apertura de guarderías gratuitas o la reducción del IVA en productos para niños.
Según consignó Cadena SER, el programa de los Hermanos de Italia muestra los siguientes 25 puntos:
- Apoyo a la natalidad y la familia
- Uso eficiente del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PNRR, por sus siglas en italiano) y de los fondos europeos
- Fiscalidad más justa y defensa del poder adquisitivo de los italianos
- Apoyar al sistema de emprendedores italianos
- Made in Italy y orgullo italiano
- Defender la dignidad del trabajo
- Dar paso a los jóvenes
- Reanimar escuelas, universidades e investigaciones
- Por un verdadero estado del bienestar que no olvide a nadie
- El derecho a una vejez tranquila
- La salud al servicio de las personas
- En defensa de la libertad y la dignidad de cada persona
- Cultura y belleza: nuestro Renacimiento
- El turismo es nuestro crecimiento feliz
- El sistema agroalimentario, pilar de Italia
- En defensa del medioambiente y la naturaleza
- Energía limpia, segura y asequible
- Reinicio de las inversiones e infraestructuras
- Transporte para una Italia más rápida, más conectada y más inteligente
- Oportunidad de crecimiento en el sur de Italia
- Detener la inmigración ilegal y devolver la seguridad a los ciudadanos
- Justicia ecuánime y rápida para ciudadanos y empresas
- Dar créditos a familias y empresas
- Presidencialismo, estabilidad gubernamental y Estado eficiente
- Italia, protagonista en Europa y en el mundo
«Violencia islamista»
La inmigración y el Islam son temas de la columna vertebral programática de Hermanos de Italia, quienes reclaman un «fuerte cambio político» ante lo que consideran una amenaza, con énfasis en el fundamentalismo.
«Italia es cada vez más insegura. La inmigración ilegal amenaza la seguridad y la calidad de vida de los ciudadanos. Nuestras ciudades están degradadas e inhabitables. Los suburbios y centros históricos son escenario de ocupaciones abusivas, violencia y microtráfico», señala el partido.
En cuanto a la situación limítrofe, el partido propuso un refuerzo en las fronteras y bloquear el acceso a puertos italianos de barcos que propicien el «tráfico de seres humanos». De hecho, Giorgia Meloni ha puesto en tela de juicio las organizaciones no gubernamentales (ONG) que trabajan en favor de los migrantes.
¿Extrema derecha o derecha radical?
La arremetida de Hermanos de Italia ha desatado distintas reacciones en torno a su postura política. Si bien ha dado señales públicas para tomar distancia de los crudos tiempos de Adolf Hitler, lo cierto es que Meloni ha sido catalogada de «fascista moderna».
Días antes de las elecciones, la colectividad expulsó al candidato Calogero Pisano, quien aseguró que Hitler era «un gran estadista». Sus palabras pusieron en tensión a los integrantes de la comunidad judía en el parlamento.
De todos modos, el analista Franco Delle Donne explicó en Cadena SER la importancia de «diferenciar entre extrema derecha y derecha radical«.
«Mientras la primera busca un sistema diferente al democrático, la derecha radical lo que busca es cambiar nuestro sistema desde dentro y ese es el gran peligro que estamos viendo en el auge de todos estos partidos en Europa», indicó el experto en comunicación política.
También indicó que «la derecha tradicional se debate entre parecerse a la ultraderecha para atraer votantes de esas formaciones y la idea de intentar mantenerse en ese mainstream de centroderecha«.
En comparación con otras naciones europeas, Delle Donne sostuvo que «la diferencia es que Italia es uno de los países más importantes, es fundador de la UE, y ahí pasa a tener otro nivel. Además, es un país ubicado en occidente de Europa y esto puede generar la necesidad a la UE de ver cómo fortalecer el estado de derecho y los valores democráticos».