El gobierno de Panamá no logra frenar las protestas

Las protestas en la República de Panamá no dejan tranquilo al gobierno de Laurentino Cortizo. Las organizaciones sociales no asistieron este jueves al diálogo convocado por el ejecutivo y que mediaba la Iglesia Católica. Los grupos de manifestantes expresaron que necesitan consensos previos mínimos para asistir a esas reuniones.

Cortizo planteó encontrar «soluciones viables y factibles a los problemas que aquejan a la sociedad». En el país centroamericano van semanas con marchas ante los efectos de la inflación sobre bencinas y alimentos. El gobierno ya había anunciado que se congelaban los precios de las bencinas y algunos productos de la canasta básica.

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Las organizaciones y los gremios calificaron de «insuficientes» las medidas anticipadas por el ejecutivo. Por esa razón se mantuvieron las protestas en diferentes ciudades y los cortes en las carreteras interurbanas. El secretario general del gremio de los profesores, Fernando Ábrego, pidió que se acuerden «las condiciones de la mesa».

La Asociación de Profesores (Asoprof), el Sindicato de la Construcción (Suntracs) y 70 organizaciones de la Alianza Pueblo Unido por la Vida plantearon lograr un «acuerdo con el gobierno» de Panamá. Claro que las agrupaciones piden antes una coordinación con el ejecutivo y no que se trate de «montar un show».

El secretario general de Suntracs, Saúl Méndez, criticó en diálogo con La Prensa que se forme «más una feria en la que entra todo el que quiere». Por eso llamó a no incluir a «gente que nada tiene que ver» con el movimiento. Los bloqueos ya provocaron desabastecimientos de algunos alimentos y de combustible en algunas ciudades.

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