Brasil registra 33 millones de personas que sufren el hambre

Un estudio de académicos y de las organizaciones civiles observa una grave crisis alimentaria en Brasil. El país más habitado del continente americano observa la cifra de tres décadas atrás de personas que sufren el hambre. Cerca de dos de cada diez brasileros no tiene un acceso mínimo a los alimentos.

La encuesta presencial de la Red Penssan en todo el territorio brasileño expone el aumento de ciudadanos sin techo y filas para acceder a los comedores populares. El aumento del hambre deriva en carnicerías vacías en las zonas rurales y las favelas. En un año los hambrientos se elevaron en 14 millones de personas.

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La investigación estima que unos 33 millones de brasileros, el 16% de sus habitantes, no tiene qué comer. Los expertos de la red advierten que la pandemia y la crisis económica no explican el aumento del hambre. El eje está en los efectos de desmantelar los planes públicos para los pobres.

La pobreza se extiende en el gigante sudamericano y el gobierno abandona las compras que permiten a los pequeños agricultores recibir una renta por suministrar alimentos a las escuelas. Y los niños que no van al colegio dejan de alimentarse al no tener comida garantizada.

El País informa que el estudio se basa en las visitas a más de 12.000 hogares entre noviembre de 2021 y abril de 2022. El investigador Nilson de Paula explica que el hambre se define «cuando un miembro de la familia deja de alimentarse, ya no queda comida ni tienen dinero para comprarla».

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