«No íbamos, jamás, sobre mi cadáver»: la vez que Mazapán no quiso hacer un show para la dictadura
La banda nacional de música infantil inventó la excusa de que todas las integrantes se había enfermado poco antes de este acto por el golpe de Estado.
Mazapán, grupo nacional conocido por su música infantil, enfrentó un momento incómodo durante la dictadura cívico militar. Compuesto por Cecilia Álamos, Victoria Carvallo, Lulú Corcuera, Cecilia Echenique, Carmen Lavanchy, Verónica Prieto y Michelle Salazar, el grupo se negó a participar en un acto de aniversario del 11 de septiembre. Una decisión que generó tensiones y repercusiones.
En una entrevista con CNN Chile, Cecilia Echenique, una de las integrantes de Mazapán, relató el episodio. El grupo recibió una invitación para participar en un acto de aniversario del 11 de septiembre, pero se negaron rotundamente debido a la connotación de la fecha y la presencia de figuras políticas y militares vinculadas al régimen de Pinochet.
«Por supuesto, todas nos enfermamos de distintas cosas. Fue automático. Al día siguiente nos llegó el sobre azul (de TVN) de que hasta aquí llegaba el programa«, afirmó Cecilia Echenique. Y luego, agregó: «Y nos echaron. Bueno, no íbamos, jamás, sobre mi cadáver, a cantarle a la Lucía (Hiriart). Imagínate con CEMA-Chile ahí celebrando… O sea, jamás«.
Cuando las integrantes de Mazapán se desquitaron por el despido
Todo esto implicó la cancelación de su participación y de sus presentaciones en el canal estatal. Un tipo de actuar que era común durante la dictadura. Y es que en esa época, las voces críticas y disidentes enfrentaban represalias y censura.
Para expresar su desacuerdo y sus valores, Mazapán decidió llevar su mensaje directamente al directorio de TVN. «Nosotros interrumpimos la reunión de directorio y entramos cantando una canción de Mazapán, la que tenía nombres y que decía: ‘Pedrito, Pedrito, vamos a jugar’. Fuimos nombrando a los directores que estaban ahí. Entonces, les cantamos a la cara«, recordó la cantante del grupo musical infantil.
«O sea, llegamos con la guitarra en la mano, cantándole a cada uno. Y miraban para abajo, se escondían… Pero nos dimos el gusto de funarlos musicalmente«, adicionó y cerró la cantante de Mazapán.
