Así es «El Diván Rojo», la obra teatral de tres actores de «Yo soy Betty, la fea» que llega a Chile

Han pasado casi 24 años desde que se estrenó Yo soy Betty, la fea en Colombia y se ha convertido en una de las teleseries más vistas en la televisión latinoamericana, así como en las plataformas de streaming. Si bien este éxito ha permanecido incólume ante los remakes y nuevas propuestas que han surgido, para todo el elenco de esta ficción hubo vida después de finalizadas las grabaciones.

En una versión más madura y teatral, tres actores de la teleserie llegan a Chile para estrenar una obra que habla sobre el amor y la estabilidad afectiva, desde el punto de vista de la terapia. Se trata de El Diván Rojo, cuyo guion también cuenta con la firma del fallecido Fernando Gaitán, creador de Betty y otras célebres teleseries como Café con aroma de mujer.

Natalia Ramírez (Marcela Valencia), Lorna Cepeda (Patricia Fernández) y Julio César Herrera (Freddy Contreras) participan en esta obra de teatro, en la que un sexólogo trata a una mujer que tiende a fijarse en todos los hombres, pero anhela tener una relación afectiva con uno solo. La trama fue adaptada a los nuevos tiempos e incluso cuenta con algunos guiños a Betty.

ADN conversó con los tres actores sobre el contenido de El Diván Rojo y el cariño que han recibido en distintos países, que aún recuerdan sus célebres personajes. El montaje se presentará el jueves 20 de abril a las 20:0 horas en el Teatro Coliseo. Las entradas están disponibles a través del sistema Puntoticket.

El cariño de los fans de Betty

Natalia Ramírez es la productora de la obra y además tiene una participación especial. Consultada sobre el legado de Fernando Gaitán, expresó que «los herederos no querían que su legado muriera con su muerte. Nos pidieron que hiciéramos esta obra para mantener su nombre en alto y que no sólo se le recordara por la televisión, sino también por el teatro. Esta es la razón por la que estamos haciéndole un homenaje con esta obra en toda Hispanoamérica».

Respecto de la recepción que ha tenido El Diván Rojo, tras su paso por México y Colombia, entre otros países, Lorna Cepeda comentó que «ha sido muy bonita, es un público increíble y maravilloso en todas las partes a las que hemos ido«.

«Hemos llenado y no lo digo con el ego, sino con todo el cariño que puedo sentir o que podemos sentir de la gente. Les gusta mucho la obra y sentimos ese cariño cuando salimos a escena. Cuando terminamos la obra de trabajo, la gente nos espera… todo el tiempo estamos recibiendo ese amor del público, cosa que nos parece increíble. Siempre es muy lindo recibir ese amorcito de la gente».

Por cierto, los tres tienen claro el impacto que generó Betty en la memoria colectiva, sobre todo en el caso de Chile. «Pues a mí me gusta, habla bien de un trabajo que empezamos a hacerlo un agosto de 1999, en el siglo pasado, finales del siglo XX», expresó Julio César Herrera.

«Después de 24 años, la gente todavía sigue hablando», continuó el actor. «Afortunadamente, hicimos un buen trabajo con el cual el público se conectó con la historia. Hoy por hoy decimos: miren todo lo que ocurría hace 23 años y miren cómo el mundo ha cambiado, qué sería de esta serie, la recibirían igual, pero fíjate que la han recibido igual, se siguen riendo, entonces la gente ya como que lo agarra como miren eso, me río, pero reflexiono, eso está bien o está mal, pero igual me sigo divirtiendo. Entonces la sonrisa te invita a reflexionar y eso es lo que ha hecho todos estos años Betty la fea«.

A lo que Natalia complementó: «Realmente, cuando recibimos esta acogida y esta maravilla, para mí es difícil, porque es tanta la emoción que nos invade, de verdad, nos saca lágrimas, porque la gente nos recibe con un cariño tan grande y tan inmenso que… no es que sea increíble, es muy creíble después de 34 años que esto siga sucediendo. Entonces es maravilloso ver que la tarea se hizo y que todavía tiene frutos«.

Una obra romántica, sencilla, pero no ligera

El Diván Rojo es una comedia romántica de trama sencilla, pero que no es ligera. Al contrario, tiene un trasfondo en el que se confrontan dos puntos de vista: lo que piensan los hombres cuando aman a las mujeres, y las mujeres que se ven expuestas ante ciertos comentarios cuando tienen varias relaciones. Allí es donde se le dio un giro a la trama que había planteado Gaitán.

«La historia es muy sencilla, una historia que se vive todo el tiempo», relata Julio César. «O sea, nosotros los hombres estamos agobiados porque ustedes, las mujeres, sólo se la pasan pensando en hombres. Entonces el personaje de Lorna llega al consultorio de un sexólogo, porque ella quiere amar a un solo hombre, quiere amar a una sola persona. Yo encarno esta parte del hombre espiritual, de ese ser de luz que somos, para enseñarle a ella el porqué se debe amar a una sola persona».}

«¡Qué paciencia es la que hay que tener!», exclama Natalia en medio de la exposición de su compañero. «Sí, los hombres sufrimos mucho con esto por parte de ustedes. Entonces hacemos una serie de terapias para que ella entienda cómo es que funciona el corazón de un hombre para amar a una sola persona«, responde Herrera.

Por su parte, Lorna Cepeda explicó que «creo que nos atrevimos a hacer algo un poco distinto con el tema de este tiempo, lo que estamos viviendo, el empoderamiento de las mujeres y ese tipo de cosas, el lugar que se le da a la mujer hoy día. No tiene nada que ver con que a una mujer le gusten todos los hombres, el tema es que a la paciente le gustan todos los hombres, pero ella quiere tener solo una relación. Trasladamos de una manera diferente porque estamos acostumbrados a que el hombre es el que hace ese tipo de cosas, pero a la mujer se le juzga severamente por hacer esto, por salir con varios tipos, entonces la tildan de loca o lo que quieres».

«No es tan ligera porque al final el mensaje es muy bonito, y al final tiene un mensaje que sería chévere que la gente leyera o viviera, sobre todo los hombres. Esta es una comedia que queda en pareja, por ejemplo, sería bueno que fueran en pareja y digamos que para estos chicos que son traviesos y hacen este tipo de cosas, también es bueno que reflexionen un poco lo que se siente cuando una persona es infiel o no es infiel. Es un mundo de temas que pueden estar ahí, que se pueden tocar en la obra y realmente te pueden hacer reflexionar», finalizó la actriz.