Llegó a Cobreloa tras jugar en Argentina, pero no le gustó Calama: “Es feo, se ve pura tierra”
“Busqué árboles, y no había ninguno, era puro desierto”, comentó el hondureño Eduardo Bennett tras recordar su primer día en la ciudad norteña.
Foto: Estadio Seguro
Eduardo Bennett, delantero hondureño ya retirado, vistió la camiseta de Cobreloa en el año 2000, cedido por Argentinos Juniors. En su paso por los “loínos”, el atacante anotó goles y jugó Copa Libertadores, pero hay algo que nunca le gustó: la ciudad de Calama.
Así lo reconoció el propio exjugador en diálogo con FutRock, donde recordó la ingrata sorpresa que se llevó cuando conoció Calama por primera vez.
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“Cuando llegué a Cobreloa, llegué de noche, entonces tú veías las luces y estaba todo bien. Al día siguiente, me levanté a las 8 de mañana, y en vez de ver montañas verdes, se ve pura tierra. Pensé que había árboles al otro lado del hotel, así que me di la vuelta para buscar árboles, y no había ninguno, era puro desierto. Ahí dije ‘Dios, qué me ha traído hasta acá’”, comentó Eduardo Bennett.
“Para llevar a mi esposa a Calama, le tuve que contarle una historia... Calama es feo, no hay malls, no hay parques, no hay autopista, no hay galería, no es como Argentina, es totalmente diferente. Gracias a Dios mi esposa se adaptó de manera pronta y rápida”, concluyó el exfutbolista hondureño.
