Crisis en la industria frutícola: más de mil contenedores de cerezas chilenas en China serían destruidos tras retraso de buque
De acuerdo con fuentes de Radio ADN, la totalidad de la fruta exportada se encuentra en mal estado, lo que afectaría a pequeños y medianos exportadores.
Getty Images / Julio Cesar Pires
El arribo del buque Saltoro al puerto de Nansha, China, con más de 1.300 contenedores de cerezas chilenas, generó una crisis en la industria frutícola.
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Luego de un retraso de casi un mes debido a problemas mecánicos, las inspecciones sanitarias revelaron un alto nivel de pudrición en la fruta, lo que impediría su comercialización.
Todo perdido
De acuerdo con fuentes de Radio ADN, la totalidad del cargamento se encuentra en mal estado, lo que obligaría a su destrucción masiva.
Sin embargo, las autoridades chinas aún evalúan los procedimientos para eliminar un volumen tan grande de producto, ya que los costos de destrucción oscilarían entre los 2.000 y 4.000 dólares por contenedor (entre dos a cuatro millones de pesos chilenos).
El problema no solo afecta a los exportadores, sino que también provocó un conflicto con la naviera Maersk. Según la misma fuente consultada, los recibidores asumirían el costo de la destrucción, pero posteriormente este podría ser traspasado a los exportadores y, finalmente, a la naviera.
Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), confirmó que las cerezas transportadas en el Saltoro enfrentan serios problemas de calidad, con signos evidentes de deterioro, indicó el Portal Fruticola. “En los primeros contenedores descargados se ha visto fruta blanda y con pudrición. Es muy probable que no pueda venderse en el mercado”, señaló.
Desde la industria advierten que esta crisis podría llevar a la quiebra a pequeños y medianos exportadores, lo que representa un duro golpe para el sector frutícola chileno. Además, existe preocupación por el impacto en la imagen del país como proveedor de cerezas de calidad en el mercado chino, uno de sus principales destinos.
Mientras tanto, la aduana china continúa analizando el cargamento, sin definir aún los pasos a seguir. Se espera que en los próximos días se tome una decisión definitiva sobre la eliminación de la fruta y las posibles consecuencias para los involucrados en la cadena de exportación.
