Es una decisión rara, que cambia drásticamente lo que ha sido por años un evento tan esperado como la Gala del Festival de Viña del Mar.

Resulta que en el Qué te lo Digo dieron a conocer una llamativa decisión que habría tomado la organización festivalera respecto a esta instancia.

Una determinación que no habría gustado para nada a los viñamarinos, ni tampoco a figuras como Sergio Rojas, que los criticaron con todo.

Los cambios de la Gala del Festival de Viña

Así, la gala, que se realizará el próximo 21 de febrero, no solo dejó su tradicional alfombra roja afuera del hotel Enjoy.

Esto porque Mega, Bizarro y la municipalidad optaron por realizar la fiesta en otro espacio de la ciudad: el Sporting de Viña del Mar.

Un espacio al que arribarían más de 200 famosos invitados, y que daría el vamos a los días festivaleros en una instancia que siempre sorprende.

De hecho, una de las sorpresas que tendría esta versión es un cambio que no habría gustado del todo. Uno que tendría que ver con cobrar una entrada al público que quiera ver a las estrellas desfilar con sus mejores looks.

Y no solo eso, ya que Luis Sandoval, periodista del programa de Zona Latina, reveló que, junto con pagar un ticket, la gente que quiera asistir tendrá que hacerlo nada menos que vestidos también para la ocasión.

“Van a desfilar 250 rostros que van a ir desfilando en la alfombra roja, no van a ser entrevistados, van a ir pasando rápido... va a haber una pregala, que va a empezar a toda la hora de calor, desde las 18.30 a 20.30... los animadores son Joaquín Méndez y Paula Escobar”, partió contando. Y agregó que también va a haber un backstage, donde estarán Natasha Kennard y Michael Roldán.

Y además “este año, primera vez, no tengo conciencia de que haya ocurrido en otra oportunidad, te van a cobrar entradas, la gala sería pagada, no es gratis, todo el dinero recaudado va a ir en beneficio... no tengo idea de quién, y no solo eso, sino que se le exigiría al público asistente ir formal o semiformal”, lanzó.

Una medida que ya molestó a varios, sobre todo a su compañero Rojas, quien aseguró que ya se había perdido el foco del evento y que no tenía sentido pagar por un patrimonio histórico. “Esto es un negocio... me parece que traten de meterle la cuchufleta a la gente, por qué la gente va a tener que pagar”, cerró.

De esta forma, ahora habrá que esperar para ver si Mega confirma la medida, y si la gente que quiera ir a ver la Gala desde cerca, como todos los años, se anima a pagar por ello.