Aumento de homicidios previos a Navidad refleja consolidación de redes criminales en Chile
Se registraron 13 asesinatos en tres días, con una preocupante concentración en la Región Metropolitana.
Aumento de homicidios previos a Navidad refleja consolidación de redes criminales en Chile / Lukas Solis
Por Sergio Bravo – Especialista en Crimen Organizado y Lavado de Activos
En las últimas semanas, Chile ha presenciado una ola de homicidios que ha encendido las alarmas en materia de seguridad pública. Antes de Navidad se registraron13 asesinatos en tres días, con una preocupante concentración en la Región Metropolitana. Este fenómeno no es aislado, sino que responde a un patrón que refleja la consolidación de organizaciones criminales transnacionales en el país, como el Tren de Aragua, cuyas operaciones se expanden con rapidez y violencia.
Uno de los casos que más impactó a la opinión pública ocurrió en Huechuraba, donde un hombre de 33 años fue ejecutado con ocho disparos frente a su domicilio en la población La Pincoya. Este homicidio no solo refleja el nivel de impunidad con que operan estas bandas, sino también su creciente dominio territorial. Estos hechos coinciden con el informe de la Fiscalía Nacional que señala un incremento del 10,54% en la tasa de homicidios durante 2024, alcanzando un total de 2.664 casos.
Un Nuevo Escenario del Crimen: Control Territorial y Diversificación
Desde una mirada técnica, el aumento de homicidios no puede analizarse de forma aislada. Las organizaciones criminales en Chile están replicando modelos de criminalidad estructurada, donde el sicariato y los ajustes de cuentas son solo una arista de operaciones más amplias que incluyen trata de personas, tráfico de drogas, explotación sexual y extorsión.
La reciente desarticulación de una célula del Tren de Aragua en las cercanías de La Moneda revela la osadía de estas redes y su capacidad de operar a escasos metros del poder político. La ubicación estratégica de estas bandas cerca de centros neurálgicos no es casualidad: buscan enviar un mensaje de control y desafiar la autoridad del Estado.
El Factor Político: Desafíos para el Estado Chileno
Políticamente, el crecimiento del crimen organizado es una prueba de fuego para las instituciones chilenas. La penetración de estas redes pone en evidencia debilidades en el control fronterizo, en la coordinación interinstitucional y en la capacidad de respuesta del sistema judicial y policial.
Chile, que hasta hace algunos años mantenía niveles de violencia controlados en comparación con otros países de la región, enfrenta ahora una nueva etapa de criminalidad que requiere estrategias innovadoras y contundentes. El fortalecimiento de la inteligencia criminal y la cooperación internacional son pasos obligados, pero insuficientes sin una política integral de prevención y desarticulación temprana.
El Rol de la Sociedad y la Participación Ciudadana
La ciudadanía debe jugar un papel central en esta lucha. La democracia directa y la participación comunitaria pueden convertirse en herramientas clave para recuperar los espacios públicos y fortalecer la seguridad local. Programas de denuncia anónima, cabildos ciudadanos de seguridad y formación en prevención del delito son esenciales para construir una red que impida la consolidación de estas estructuras.
Conclusión
La escalada de homicidios previos a Navidad es un recordatorio urgente de la necesidad de respuestas rápidas y coordinadas. Chile aún está a tiempo de contener el avance del crimen organizado, pero esto exige un compromiso transversal de autoridades, fuerzas de seguridad y la sociedad civil.
La seguridad no es solo responsabilidad del Estado; es un derecho de todos los ciudadanos y un deber compartido. Recuperar la tranquilidad en nuestras calles y barrios no será tarea fácil, pero con decisión política, transparencia y participación ciudadana, es un objetivo alcanzable.
