De residuos alimentarios a la alta cocina: este es el hongo que transforma desechos en comida con alto valor nutricional
Según datos de diversos indicadores, 570 millones de toneladas de alimentos son desperdiciados cada año en todo el mundo.
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Un equipo multidisciplinario de científicos, chefs, ingenieros y expertos en ciencias de los alimentos, realizó una investigación respecto a la caracterización de un hongo que podría ayudar a reducir los desechos y, al mismo tiempo, producir nuevos alimentos que sean sabrosos y nutritivos.
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Según datos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), 570 millones de toneladas de alimentos son desperdiciados cada año en todo el mundo, mientras que en Chile el panorama no es tan diferente, ya que anualmente se desperdician 3.700 millones de kilos de alimentos, según el Ministerio de Agricultura.
En ello, la investigación, que fue publicada en la revista Nature, reveló que la Neurospora intermedia, un hongo de color naranja que se multiplica y crece al cultivarse en desechos de la industria alimentaria, logra transformar positivamente las materias primas.
En detalle, al ser utilizado, el hongo modifica desperdicios de alimentos en nuevos productos con alto valor nutricional, ya que posee enzimas capaces de descomponer compuestos como la celulosa y la pectina, azúcares que son beneficiosos para la nutrición humana, pero que nuestro organismo no puede digerir.
El doctor Luis Larrondo, director del Instituto Milenio de Biología Integrativa (iBio), destacó esta innovación como un avance que resalta tanto el valor tradicional como el potencial futuro de la fermentación fúngica para crear alimentos nutritivos.
“El uso de hongos para la reutilización de desechos de la industria alimentaria ofrece múltiples beneficios para la seguridad y la sostenibilidad. ¿La razón? Permiten la transformación de productos no digeribles o con bajo valor nutritivo en alimentos que contribuyen a la salud humana”, señaló.
Asimismo, sostuvo que “este proceso se realiza de manera rápida y sostenible, en comparación con los métodos tradicionales de producción alimentaria, que suelen implicar la explotación del suelo y el monocultivo”.
Este hallazgo sugiere que el hongo Neurospora intermedia podría contribuir a la creación de alimentos más nutritivos, de fácil digestión y con mejores atributos sensoriales.