Revelan detalles de infanticidio en Los Ángeles: el padre no sabía del embarazo y fue quien encontró el cuerpo

El Juzgado de Garantía de Los Ángeles decretó arresto domiciliario total y arraigo nacional para N.E.A.G., una técnico en enfermería de la misma ciudad, imputada por infanticidio tras el hallazgo del cuerpo de su recién nacida en el refrigerador de su hogar. Según se reveló en la audiencia de formalización, la mujer, quien ya es madre de tres hijos, ocultó su embarazo a su pareja, quien desconocía la situación y terminó realizando la denuncia tras el macabro hallazgo.

De acuerdo con la información entregada en la audiencia, la mujer sabía de su embarazo desde hace meses pero no acudió a controles médicos. A las 40 semanas, en su domicilio ubicado en la villa Las Quintas, inició trabajo de parto y decidió dar a luz en la bañera, donde cortó el cordón umbilical de la recién nacida. Luego, según la investigación, dejó a la bebé en el agua y se retiró a dormir.

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La autopsia reveló que la recién nacida murió poco después del parto, a causa de asfixia por inmersión. A la mañana siguiente, N.E.A.G. colocó el cuerpo en una bolsa plástica que escondió en el refrigerador. Su pareja, quien desconocía por completo el embarazo, creía que el aumento de peso de la imputada se debía a otros factores de salud.

El pasado sábado 26 de octubre, el hombre encontró el cuerpo de la bebé mientras realizaba labores de limpieza en la cocina. Al abrir la parte inferior del refrigerador, donde se guardan las verduras, halló la bolsa de basura negra que contenía el cuerpo. Tras el descubrimiento, intentó comunicarse con su pareja, quien respondió: “llegando a la casa, conversamos”. Acto seguido, el hombre se dirigió a Carabineros para presentar la denuncia, informa el diario La Tribuna.

Durante la audiencia, la magistrada Soledad García Nannig acogió las medidas cautelares solicitadas por el Ministerio Público, dejando a N.E.A.G. en arresto domiciliario total mientras se desarrolla la investigación, la cual se fijó con un plazo de seis meses. La medida busca esclarecer los detalles del caso y determinar las responsabilidades de la imputada.

El caso ha generado conmoción en la comunidad local y subraya la gravedad de los hechos, así como el impacto emocional en el entorno familiar inmediato. Mientras se desarrollan las diligencias, la imputada permanecerá bajo supervisión de las autoridades, en espera de mayores avances en la investigación.