NBA: estrella de Chicago Bulls regresó oficialmente a la acción tras dos años de ausencia

La temporada 2024-25 de la NBA ya está aquí, ya es una realidad y comienza a tomar forma poco a poco en su semana inaugural que mantiene más que felices a los aficionados.

Al día de hoy ya se han disputado 12 partidos, distribuidos en dos jornadas, en los que vimos el debut de Boston Celtics, los vigentes campeones; a LeBron James jugar con Bronny, y duelos de muy buen nivel.

En este contexto también vimos el regreso de destacadas figuras que siguen fortaleciendo su vínculo con sus respectivas franquicias, así como también están los que cambiaron de equipo.

Pero hay un caso bastante especial, ya que se trata de una vuelta mucho más significativa y emotiva; ni un regreso del retiro ni volver al club donde dejó huella, hablamos de alguien que venció una dura lesión.

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Se trata nada más y nada menos que de Lonzo Ball, quien sufrió una compleja lesión el 14 de enero de 2022, quedando fuera de las canchas por más de mil días, sumergido en una angustiante incertidumbre.

Más de dos tuvieron que pasar para que el jugador de Chicago Bulls vuelva a competir en temporada regular, por los puntos. Hay que recordar que volvió a las canchas como tal en los amistosos de pretemporada.

El base tuvo que superar una rotura de menisco que se fue complicando cada vez más, obligándolo a someterse a tres artroscopias y a un trasplante de cartílago en marzo de 2023. Todo eso, intentando salvar su carrera, ya que muchos apostaban por el retiro.

Con una recuperación calificada como “milagrosa” por la prensa especializada y los fanáticos, tuvo su esperado retorno a la NBA. En cuanto a lo deportivo en el nivel colectivo, los Bulls cayeron 123 - 111 ante New Orleans Pelicans.

Un hito esperanzador

Lonzo Ball disputó 14 minutos de juego con una rotación que encaja en su condición, ya que debe mantener cierto resguardo en estos primeros duelos, pensando en alcanzar plenitud de nivel a mediano o largo plazo.

En ese tiempo dentro de la cancha anotó 5 puntos, registrando 50% en tiros de campo, 33.3% en triples y sin tiros libres anotados. Además, aportó con 4 asistencias y ganó 2 rebotes.

Después del juego, el basquetbolista declaró que su experiencia fue “bastante parecida a los partidos amistosos. He tenido los mismos tiros y los mismos minutos”.

“Quiero estar en pista todo el rato, pero tengo que escuchar al cuerpo técnico y hacer lo que sea mejor para el largo plazo (...) cada vez que el entrenador diga mi nombre voy a intentar darle unos buenos minutos”, comentó.

“Por ahora estoy contento de poder jugar, aunque me habría sentido mejor si hubiésemos ganado. Vamos a por el siguiente”, añadió, mirando con ilusión lo que viene a futuro.

Una recuperación milagrosa

Además de plasmar sus sensaciones de estar nuevamente en la duela, el base de 26 años también reflexionó sobre la verdadera lucha y hazaña que significó recuperarse.

“Se me ha hecho largo, realmente largo, pero al mirar en retrospectiva fue mucho más rápido de lo que pensaba. Me dijeron que me quedaban 18 meses de recuperación tras la tercera cirugía y en ese momento me pareció una locura, pero ahora estoy aquí. Ya es todo cosa del pasado”, comenzó diciendo.

De igual manera, reconoce que “no es el mismo cuerpo con el que empecé, pero creo que todavía puedo ser productivo y efectivo en la cancha”, mirando con nostalgia lo que era antes de la lesión.

Asimismo, destacó la proeza de su recuperación, puntualizando que “esto es algo de lo que nadie se ha recuperado realmente, así que seré el primero”.

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