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A 12 años del viral: ¿En qué están hoy los protagonistas del recordado video “Adiós, tía Paty”?

En el 2012, una familia de la región de Ñuble grabó un video casero, que por razones entonces equivocadas, rápidamente empezó a ser compartido por todas las redes sociales.

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12 años atrás, un video casero que rápidamente se volvió viral capturó la atención de muchos chilenos. En el clip, una madre ensayaba una canción mientras dos de sus hijos aparecían en la escena, haciendo travesuras a su lado.

El video se hizo famoso por frases que hoy en día siguen siendo parte de la cultura de internet, como “Adiós, tía Paty, adiós, tía Lela” y “¿Qué es lo que he hecho?”. Este registro, que parecía un momento familiar más, fue protagonizado por Jacqueline Carriel y sus hijos, Juan Guillermo y Rocío Fuentes Carriel, quienes en ese entonces tenían solo 8 y 4 años.

Hoy, más de una década después, Jacqueline y su familia siguen recordados por aquel divertido video, mientras actualmente residen en San Roque, comuna de Niquén, Región de Ñuble. “Hay personas que no saben que me llamo Jacqueline y me dicen tía Paty, pero estoy acostumbrada porque es parte de mí”, comentó la protagonista del viral registro a LUN, quien trabaja como asistente de educación en la Escuela San Jorge.

La historia detrás del video es simple. Jacqueline había decidido componer una canción para las tías del jardín de su hija Rocío, como un gesto de agradecimiento. Mientras ensayaba, sus hijos se unieron de manera espontánea, haciendo caras graciosas y exagerando las notas musicales. “Nunca pensé que se iba a hacer tan conocida”, explicó.

¿Cómo pasó el tiempo en los protagonistas de este viral?

El paso del tiempo ha traído muchos cambios para la familia. Juan Guillermo, quien fue el niño que pronunció la famosa frase “¿Qué es lo que he hecho?”, ahora con 20 años estudia Medicina, mientras que Rocío, su hermana, hoy de 16 años, está en tercero medio y se ha convertido en una talentosa autodidacta en la música, tocando instrumentos como el piano, el charango y la guitarra.

Sobre su hijo mayor, Felipe, de 31 años, Jacqueline mencionó con humor: “Él siempre decía ‘pucha, yo no soy conocido, no soy famoso’, porque él estuvo presente cuando hicimos el video, pero detrás de la cámara, jajaja. Ahora es prevencionista de riesgos y trabaja en una mina”.

Jacqueline enviudó dos años después de hacerse conocida

La exposición mediática que recibió Jacqueline por el video viral la llevó a aparecer en varios programas de televisión. “Estuve en todos lados. Tengo lindos recuerdos, para mí fue una bendición haber sido conocida, porque también gané algo de dinero”, expresó. Esta fama inesperada le permitió abrirse puertas en su carrera, incluso llegando a componer una canción para el cortometraje Michael, la historia de un guerrero, basado en la vida de un niño y su cáncer.

Además de los cambios en su vida profesional, Jacqueline experimentó transformaciones en su vida personal. Enviudó dos años después del boom del video, pero hace tres años encontró nuevamente el amor al casarse con Pascual Zambrano. “Ha sido un padre para mis hijos y estoy muy agradecida. Mi vida ha cambiado mucho desde que fui conocida”, afirmó con gratitud.

El tiempo ha pasado, pero el video sigue siendo parte de la memoria colectiva en Chile. “Todavía me piden que cante la famosa canción, aunque siempre es más novedoso en los lugares fuera de donde vivo, porque uno no es profeta en su tierra”, mencionó Jacqueline con una sonrisa. La ropa que usaba en el video aún la conserva, un recordatorio de aquel momento que, sin buscarlo, la convirtió en un ícono viral de la cultura digital chilena.

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