“Desgraciadamente, hemos tenido que enfrentar acusaciones que se dan por ciertas sin haber tenido la oportunidad de responderlas adecuadamente”, afirmó Vivanco.
La ministra también hizo referencia a la suspensión cautelar impuesta por la Corte Suprema, que le impide desempeñar sus funciones mientras se tramita un cuaderno de remoción. “Estoy recabando, con dificultades, la información real a través de mis abogados y me interesa aclarar cada uno de los puntos en que he sido mencionada”, agregó.
El escándalo se desató tras la filtración de conversaciones entre Vivanco y el abogado Luis Hermosilla, en las que se discuten favores mutuos. Estas revelaciones llevaron a la Corte Suprema a suspender a la jueza y a abrir un proceso de remoción. El presidente del máximo tribunal, Ricardo Blanco Herrera, señaló que las acusaciones afectan principios fundamentales del Poder Judicial, como la independencia y la probidad.
En tanto, Ángela Vivanco concluyó su mensaje en redes sociales solicitando “la ayuda de Dios en este arduo momento” y expresó su esperanza de que el futuro le depare justicia.
Además, la situación ha generado una fuerte reacción política, con el anuncio de varias acusaciones constitucionales en su contra, y otros magistrados, como Jean Pierre Matus.
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