Durante los últimos años, Hollywood ha gozado de una muy buena camada de jóvenes actores, con destacados nombres que a una corta edad ya cuentan con una importante carrera, formando parte de títulos aclamados.
Dentro de este selecto grupo encontramos a Jenna Ortega, de tan solo 21 años, pero que ya ha participado en proyectos como Merlina, Scream, Beetlejuice 2 y X, entre otros.
Al día de hoy se ha convertido en uno de los rostros femeninos más cotizados en la industria, ya que su inclusión dentro de un filme le suma un valor agregado y capta la atención de sus seguidores.
Pero lo cierto es que no siempre ha sido así, y además de ir escalando desde sus inicios, hace no muchos años fue directamente rechazada para protagonizar una película que se convirtió en un éxito de proporciones.
Se trata nada más y nada menos que de Dune, donde buscaba quedarse con el papel de Chani, quien tuvo un rol misterioso y secundario en la primera parte, pero que se alzó para la segunda entrega, asumiendo mayor importancia de cara a la tercera película.
Hay que recordar que la actriz seleccionada para el papel fue Zendaya, otra de las jóvenes que ha ido ganándose un lugar importante en la industria cinematográfica y que supo sacar el trabajo adelante de buena manera.
Fue la propia Ortega quien se refirió al tema en una reciente entrevista con BuzzFeed. Aun así, se debe destacar que la intérprete tenía solo 15 años cuando adicionó, aunque en primera instancia no tenía claridad sobre el papel al que aspiraba.
“Creo que era el de Chani, el de Zendaya”, comenzó diciendo, pero enfatizó en que “no decían eso, era todo muy secreto”. Peor al día de hoy no es más que una anécdota y un pensamiento de lo que pudo haber sido.
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