Operativo en la región Metropolitana desarticula bandas con armamento de alto calibre y deja 14 detenidos
Las agrupaciones criminales estaban involucradas en delitos como disparos injustificados y tráfico de drogas.
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En un exitoso operativo realizado por la Policía de Investigaciones (PDI) en conjunto con la Fiscalía Metropolitana Sur, se logró desarticular a dos peligrosas bandas criminales que operaban en la región Metropolitana, específicamente en las comunas de San Ramón y José María Caro.
Las agrupaciones criminales, que poseían armamento de alto calibre, estaban involucradas en delitos como disparos injustificados y tráfico de drogas.
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El prefecto inspector Rodrigo Fuentes, jefe de la región Policial Metropolitana de Santiago, explicó que en ambas operaciones “se lograron sacar de circulación aproximadamente 20 armas de fuego que estaban aptas para disparo, una cantidad importante de munición de distintos calibres, incluidos calibres utilizados en armas de guerra”.
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Asimismo, añadió que “las armas eran ofrecidas en redes sociales, incluso en plataformas donde cualquier persona podía acceder para adquirirlas o arrendarlas”.
Entre los detenidos, 14 en total, un ciudadano chileno se dedicaba a la modificación ilegal de armas. Según explicó el prefecto Fuentes, “estas armas eran adquiridas como armas de fogueo y luego modificadas para quedar aptas para su uso real, un negocio lucrativo dentro del mundo del crimen organizado”.
El resto de los aprehendidos, todos de nacionalidad chilena, se encuentran bajo proceso judicial. “Algunos de ellos están en prisión preventiva”, señaló el prefecto inspector Fuentes.
Análisis de las armas incautadas
Por su parte, el comisario Miguel Chaparro, perito balístico del Laboratorio de Criminalística Central de la PDI, detalló el proceso de análisis de las armas incautadas: “Lo que realizamos primero es su identificación y clasificación para ver si son elementos constitutivos de infracción a la ley de armas. Luego, realizamos pruebas de funcionamiento para capturar muestras balísticas y determinar si han sido utilizadas en otros delitos”.
Por su parte, el fiscal regional metropolitano sur, Héctor Barros, destacó la gravedad de la situación: “El proveer armas de fuego a organizaciones territoriales es uno de los mercados más lucrativos para estas estructuras criminales. Estas armas no solo se usan en enfrentamientos entre bandas, sino que también son responsables de disparos injustificados que terminan matando a personas inocentes”.
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