El gerente general de la Siderúrgica Huachipato, Jean Paul Sauré, valoró los esfuerzos realizados por el ministro de Economía, Nicolás Grau, para evitar el cierre de la planta, a pesar de las críticas del secretario de Estado hacia la empresa CAP. A través de la imposición de sobretasas al acero importado de China, se intentó corregir las distorsiones del mercado que amenazaban el futuro de Huachipato. Sin embargo, las medidas no lograron el efecto esperado, y la empresa finalmente anunció su cierre.

Durante una sesión de la Comisión de Economía del Senado, Sauré expresó su gratitud hacia Grau, destacando su compromiso y lamentando que no se pudiera continuar con las operaciones de la empresa. “Darle un agradecimiento en particular a él, yo sé que se la jugó y comprendo su frustración y lamentablemente no pudimos seguir”, afirmó Sauré. Sin embargo, sus palabras fueron pronunciadas después de que Grau abandonara el encuentro, el cual se llevó a cabo de forma telemática.

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El anuncio del cierre fue comunicado internamente en la empresa minutos antes de informar a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), debido a regulaciones. Sauré explicó que las pérdidas de la empresa se debieron a las distorsiones provocadas por el dumping del acero chino, que permitió a China exportar acero a precios más bajos. La importación masiva de bolas de acero a precios reducidos impidió la transferencia de costos a los clientes, lo que agravó la situación financiera de Huachipato, señala La Tercera.

Ante el cierre inminente, Sauré indicó que la empresa implementará un “proceso de acompañamiento y reinserción laboral” para los trabajadores afectados, asegurando el cumplimiento de todos los compromisos laborales. Las operaciones de producción emblemáticas, como el alto horno y la acería de colada, finalizarán antes de las Fiestas Patrias, mientras que la venta del stock disponible y el cierre definitivo están programados para octubre.

“La idea es reconvertirnos en algún minuto”

En cuanto al futuro, Sauré mencionó la posibilidad de volver a operar en algún momento como una “acería verde”, aunque reconoció que esto podría tomar varios años. “La idea es reconvertirnos en algún minuto, pero no quiero levantar ahí mucho interés”, comentó.

El ministro Grau criticó la incapacidad de Huachipato y Molycop para alcanzar un acuerdo sobre los niveles de venta y precios, que según su visión, eran posibles dadas las nuevas condiciones del mercado. Sin embargo, Sauré atribuyó esta falta de acuerdo a los intereses divergentes de ambas partes, que buscaban comprar y vender al mejor precio posible.