Divorcio del sueño entre parejas: por qué dormir separados en una relación no sería tan mal idea como parece
Se trata de una tendencia que tendría una serie de beneficios. Conoce aquí de qué trata.
Divorcio del sueño entre parejas: por qué dormir separados en una relación no sería tan mal idea como parece / gorodenkoff
Una de las tendencias que ha ido en aumento a la hora de ir a la cama en las noches es el llamado “divorcio del sueño” o sleep divorce.
Se trata de una idea creciente entre parejas que en simple se explicaría en la decisión consensuada de no dormir juntos.
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Y si bien la propuesta puede parecer alarmante ante la imposición social de que en las relaciones hay que cerrar los ojos en una misma cama, lo cierto es que tendría beneficios.
Así lo principal que sería priorizar la calidad del sueño en las noches.
¿Cuáles son los beneficios si las parejas duermen separadas?
Según un artículo de National Geographic, dormir separados en una relación podría evitar trastornos comunes del sueño como ronquidos e insomnio.
Claro que a la lista también se suma no verse complicado por horarios de sueños diferentes que pueden derivar en fatigas o tensiones en un vínculo afectivo.
Pero para argumentar todo incluso existen estudios, destacando uno elaborado por investigadores de la Universidad de California donde se aseguró que tras una noche de mal sueño las parejas experimentarían más peleas de lo usual.
Un dato extra es que si nos remontamos a historias pasadas incluso en la antigua Roma el lecho conyugal o “lectus genialis” se ocupaba solo para un para conversaciones o relaciones íntimas, sin ser extraño que quienes lo ocupaban se retiraran a camas separadas cuando llegaba la hora de dormir.
En síntesis dormir es dormir y los momentos significativos se construiría en otros momentos de la jornada. “El divorcio del sueño no es un castigo, es hacer lo mejor el uno por el otro”, planteó Neil Stanely, coautor del libro Divorcio del sueño: Cómo dormir separados sin separarse.
Claro que la aplicación podría evaluarse primero según la pareja, ya que en algunas ocasiones podría provocar sentimientos de desconexión emocional o simplemente reducir la intimidad espontánea existente.