Reconocida marca de accesorios de autos se declara en quiebra: tiene más de 100 años de historia

Hace algunas jornadas una famosa e histórica marca ligada al mundo automotriz se declaró en quiebra.

Conocida por elaborar asientos para automóviles, la noticia fue informada por el sello que cerraría luego de 103 años de funcionamiento.

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Se trata de la compañía de origen alemán Recaro, quien presentó la situación ante un tribunal del país europeo.

De tal forma informó así el mal momento financiero a sus 215 trabajadores de su fábrica ubicada en Kirchheim unter Teck.

La misma división también es la encargada de fabricar asientos para aviones y en el año 2011 fue vendida a Johnson Controls, empresa que cambió su nombre y operaciones comerciales, vendiéndola más tarde a Raven Acquisitions, una firma de capital privado de Estados Unidos.

También vinculada a la manufactura de asientos para aeronaves, las sillas también estaban dirigidas a vehículos de marcas como Porsche, Ford y Volkswagen.

En detalle la empresa fue fundada en el octubre del año 1906 en la ciudad de Sttugart, aunque inicialmente apuntó a carrocerías de vehículos.

Según la última presentación de resultados de Recaro, durante los últimos años una porción de sus empleados había renunciado a parte de sus sueldos a favor de la estabilidad económica de las operaciones de la compañía.

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En la última actualización también se planteó que el comité de la empresa se reuniría con los sindicatos de la misma. Todo en medio de una crisis amplia de los proveedores de vehículos.

De hecho, a la lista también se sumó el fabricante de llantas BBS, que hace algunas jornadas pidió una declaración de insolvencia en el Tribunal Local de Rottweil, tras dejar de pagar a sus trabajadores en el mes de mayo.