El presidente estadounidense, de 81 años, candidato a la reelección en las elecciones del 5 de noviembre de 2024, destacó que las elecciones serán un “período de prueba” luego el ataque al candidato republicano en un acto electoral en Butler, Pensilvania, en el que Trump resultó herido en una oreja.
“La unidad es el objetivo más difícil de alcanzar de todos, pero nada es más importante que eso en este momento”, señaló Biden desde la Casa Blanca. El presidente llamó por teléfono a Trump, a quien ha acusado de ser una amenaza para la democracia, para consultar por su estado de salud.
Trump, de 78 años, también publicó en su plataforma Truth Social un mensaje similar: “En este momento, es más importante que nunca que permanezcamos unidos (…) fuertes y determinados e impidiendo que la maldad gane”. Aseguró que “solo Dios impidió que ocurriera lo impensable”, sobre lo cerca que estuvo de su cabeza la bala disparada por Thomas Matthew Crooks, de 20 años.
Ante las críticas y la incomprensión de que algo así haya podido ocurrir en medio del fuerte dispositivo de seguridad del Servicio Secreto que protege a gobernantes y expresidentes, Biden sostuvo que había ordenado una revisión completa de la seguridad en el mitin, así como en la Convención Nacional Republicana en Milwaukee.
“Estamos totalmente preparados y tenemos un plan de seguridad integral en marcha, y estamos listos”, declaró a la prensa el domingo, Audrey Gibson-Cicchino, coordinadora del Servicio Secreto para la convención republicana. Trump estará protegido por el “más alto nivel de seguridad”, añadió.
Por tu parte, el portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, rechazó las afirmaciones “absolutamente falsas” de que se había denegado protección adicional a Trump antes del mitin del 13 de julio.
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