Lluvias en Chile: estas precipitaciones han caído hasta ahora y lo que se puede esperar durante el segundo semestre del año con el Fenómeno de La Niña
Previo a la llegada del invierno buena parte del territorio nacional experimentó la llegada de varios sistemas frontales. Revisa acá lo que se espera para lo que resta del 2024.
Pese a que durante este mes no se han presentado grandes montos de precipitaciones en Chile, sí los hubo en los meses previos a julio en el primer semestre de este 2024.
Y es que tanto el mes de mayo como el de junio estuvieron marcados por la gran cantidad de lluvias que cayeron en buena parte del territorio nacional.
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De acuerdo a Meteored, considerando la precipitación acumulada hasta el 2 de julio, se registró que el primer semestre de este 2024 ha sido notablemente lluvioso. A tal punto de que en la Estación Quinta Normal (región Metropolitana), el superávit es cercano al 95%, lo que quiere decir que prácticamente ya ha llovido todo lo que llueve en todo un año.
En el caso de la ciudad de La Serena ha llovido cerca de un 20% más de lo normal, misma situación que atraviesan otras localidades como Curicó.
Más al sur en Concepción se registra alrededor de un 15% de superávit, lo que se expresa como el mayor hasta la fecha desde el año 2005, lo que podría verse con buenos ojos de que el año lo culmine con cifras positivas.
¿Cuál es el balance en lo que va del 2024 y cómo se prevé la llegada de La Niña?
Según se indica en el pronóstico antes citado, el 2024 ha sido un año bastante lluvioso para la zona central de Chile, lo cual puede resultar extraño considerando la situación durante los últimos 15 años.
Por otro lado, se proyecta que entre los meses finales del invierno y el inicio de la primavera, el territorio nacional experimente la llegada del Fenómeno de La Niña.
Dicho fenómeno meteorológico afectaría principalmente a las regiones ubicadas en el centro y sur de Chile. Esto último con impactos principalmente ligados a la agricultura y a los recursos hídricos.
En la región de Valparaíso caerían menos precipitaciones, lo que podría provocar chances de que se agrave la sequía, situación similar a la que viviría la región Metropolitana donde también se prevén menos lluvias. En tanto, entre las regiones del Biobío y Los Lagos las temperaturas podrían bajar aún más.