En otro capítulo de Tu Nuevo ADN, Andrea Obaid conversó con Camila Rubio, directora de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB), sobre las polémicas que han surgido en torno al organismo en las últimas jornadas.
Tras un pre-informe de la Contraloría donde se calculan pagos anómalos por $16 mil millones, se ha puesto ojo en los movimientos y operaciones realizadas. Esto, con foco especial en la compra de útiles que aún no se han entregado.
Por una parte, desde la institución desmintieron los apuntes como tal, justificando y explicando lo ocurrido. Frente a esto, la invitada comenzó diciendo que todo lo que a salido muchas veces “genera más confusión que certezas”.
Bajo la misma línea, apeló a que este tipo de informes debe manejarse bajo carácter reservado para, entre otras cosas, “no generar este tipo de confusiones (...) es un elemento confidencial porque todavía faltan muchos elementos para poder generar juicios finales”.
“Tanto de la Contraloría como nosotros, iniciamos acciones administrativas de por qué se filtra esta información. No porque se quiera ocultar, sino que por la legalidad del documento; es de carácter reservado”, explicó.
Asimismo, la directora puntualizó que “el pre-informe no va a hablar de irregularidades, sino que detecta elementos que falta aclarar, es necesario profundizar o demostrar cuáles son las acciones o correcciones que debe hacer el servicio”.
En el mismo sentido, aseguró que hay varios puntos que se deben detallar, así como también sostiene que “hay etapas de ajuste con las empresas (...) muchas veces se les paga de más o de menos”.
“Es un proceso que está arreglado en las bases de licitación, no es algo que pase ahora ni que ha pasado en el último tiempo. En esa etapa de ajuste siempre se corrige cuando existen diferencias de pagos: muchas veces la JUNAEB debe recursos a algunas empresas y otras veces las empresas no deben”, explicó.
Entrega de útiles escolares
Dentro de las arista más comentadas está la demora en la entrega de útiles escolares, lo que afecta a cerca de 2 millones de estudiantes que recibirán sus kits una semana después del regreso de vacaciones de invierno; kits que debieron entregarse en marzo.
A modo de respuesta, Camila Rubio hizo hincapié en que “estos procesos son muy grandes, partieron en agosto del año pasado. No es algo que no hayamos planificado (...) son licitaciones que duran dos años”.
“Cuando se hace el análisis de los productos que llegan en el mes de febrero, por las tres empresas que son los oferentes que participaron, no cumplían con los requisitos y especificaciones técnicas”, precisó justificando los inconvenientes experimentados.
“Nuestras especificaciones técnicas son muy rigurosas, porque tienen que ver con la calidad de los productos y en eso no podemos flexibilizar (...) no cumplían con estos elementos esenciales”, puntualizo.
“No cumplían con las características”
Rubio indicó que “las empresas nos tienen que entregar los antecedentes, pero además nos tienen que entregar las muestras de los productos, porque tenemos que asegurarnos que no sean tóxicos, que la calidad sea buena y cumplan con todas las exigencias”.
“Las empresas se equivocaron, no entregaron los productos que nosotros estábamos pidiendo. Son sets distintos según el ciclo (...) las empresas no cumplían con las características técnicas y tuvimos que declararlo desierto”, explicó.
Ante esta problemática, aclaró que no se realizan compras directas a algún oferente porque no se trata de una emergencia como al para la JUNAEB, quienes tienen que ser “rigurosos con la ley de compras públicas”.
Respecto a lo que viene por delante, la directora aseguró que no tienen prevista una compensación para las familias afectadas pero también apuntó que esto no volverá a ocurrir en los próximos años.
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