Directora de Junaeb tras resultados del Mapa Nutricional: “No hay un problema de cantidad, sino de la calidad y el tipo de comida”

En otro capítulo de Tu Nuevo ADN, Andrea Obaid conversó con Camila Rubio, directora nacional de Junaeb, sobre los datos entregados en el Mapa Nutricional que se aplica en las escuelas del país respecto a la situación de los estudiantes.

Hace ya varios años que la nutrición infantil viene siendo un tema que mantiene ocupadas a las autoridades, actuando frente a escenarios preocupantes de sobrepeso y obesidad, así como también desnutrición. Todo en forma reactiva pero también preventiva a lo que resulta ser un tema de salud pública.

Como primer punto a destacar, a pesar de que los resultados encienden algunas alarmas, la invitada aseguró que “si comparamos con el año 2022, tenemos cifras que son mejores, porque hemos aumentado la prevalencia de estudiantes con estado de nutrición normal”.

“Sin embargo, hay que pensar que el 2022 fue el año comparación -después de- la pandemia. Entonces, uno esperaba que las cifras este año fueran mucho mejor considerando que era un año más normal”, mencionó, dando cuenta que dicha mejora “no es suficiente”.

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Asimismo, reconoce que “disminuye la malnutrición por exceso, que contempla el sobrepeso y obesidad, pero disminuye en un 3%. Es un avance, pasamos de un 53% a un 50%, pero significa que un 50% de los estudiantes está con malnutrición por exceso. Igual la cifra es preocupante”.

Respecto a los niveles (cursos) que son evaluados bajo el Mapa Nutricional, si bien hay una misma tendencia generalizada, se pone foco especial en 5º básico, “una etapa donde hay crecimiento, hay algunos cambios físicos, entonces hace un poco más lento los cambios de peso que se puedan generar”.

Por otra parte, Rubio hizo hincapié en el sedentarismo de los estudiantes, lo resulta ser un complemento negativo a la mala alimentación. “El hecho de que hoy jueguen menos, corran menos, hagan menos actividad física, también afecta a los resultados que tenemos, además de los alimentos”.

A raíz de esto, las autoridades trabajan en diferentes acciones e iniciativas para potenciar el deporte y la vida sana desde una temprana edad, buscando la forma de que sea más atractiva. Bajo la misma línea, además del hecho de hacer educación física y cumplir con horas curriculares (que son pocas) de ejercicio, el llamado es al juego con actividades que implique mayor movimiento, dejando un poco de lado las pantallas.

Datos del informe nutricional

Dentro de los diferentes ítems que entregó el Mapa Nutricional se precisaron varias estadísticas que diferencian entre el sexo de los estudiantes, las regiones, el nivel socioeconómico y hasta por nacionalidad.

La representante de la Junaeb afirmó que “en los sectores rurales hay mayor malnutrición por exceso que en el territorio urbano. También el estudio refleja que los estudiantes de nacionalidad extranjera tienen mayor cantidad de peso normal que los estudiantes de nacionalidad chilena”.

“Hay otro indicador importante que tiene que ver con el registro social de hogares, donde hacemos el cruce para poder evaluar la vulnerabilidad. Podemos identificar que aquellos niños que tienen menor registro social de hogar, tienen mayor prevalencia a tener malnutrición por exceso”, explicó.

Un problema de calidad, no de cantidad

Bajo este escenario, Camila Rubio hizo hincapié en que hoy en día “no hay un problema de cantidad de comida, sino de la calidad y el tipo de comida que estamos consumiendo”.

“Hay muchos estudiantes que son parte del programa de alimentación escolar, quienes comen en el colegio (...) pero donde nos caemos es en las colaciones”, comentó, aludiendo a la comida chatarra y poco saludable que los niños suelen llevar desde sus casas.

“Es importante complementar la alimentación. La colación es fundamental”, enfatizó, apuntando que es importante el “esfuerzo del Estado, pero también de las familias”.