En pleno sorteo de la Copa Chile 2024, hubo un nombre que llamó la atención: el del Club 11 de septiembre, perteneciente a la Zona Norte.

El equipo, nacido el año 2011, recuerda uno de los días más oscuros de la historia de nuestro país: la jornada de bombardeo a La Moneda que dio inicio a la dictadura militar.

Por eso, apenas lo nombraron en el bolillero, en X varios se preguntaron de dónde había salido y por qué aquel nombre.

“¿Qué tan facho tienes que ser para que tu equipo se llame 11 de septiembre?”, se preguntó uno de los usuarios de la plataforma.

La historia del Club 11 de septiembre

Frente a esta serie de comentarios, en el elenco que ostenta 13 años de historia, incluyendo competencias internacionales en Perú, han salido varias veces a aclarar esta situación en redes sociales.

Es que no han sido pocos los que lo asocian a la política. “Somos un club de barrio, nacido y fundado en la bella ciudad de Arica en la población 11 de Septiembre. De ahí el nombre, sin tinte político o para ocasionar malestar. Es nuestro nombre y bandera, la defenderemos con orgullo. Nada se nos ha regalado y estamos luchando al igual que muchos clubes de Chile por darle un lugar más a tantos jóvenes talentos que quedan sin opción”, explicó Francisco Javier Gaubert, hincha del club, al sitio En Cancha.

En dicha instancia, explicaron que “la institución ariqueña representa a la Población Raúl Silva Henríquez, de Arica y, al momento de su creación (19 de octubre de 2011), los fundadores quisieron rendirle tributo al nombre anterior del enclave. El lugar comenzó en 1970, como una toma de un terreno baldío que se llamó Población Venceremos, apelativo que la Dictadura Militar eliminó y lo cambió por 11 de Septiembre en 1973, pese a que no existió ningún decreto municipal para bautizar tal lugar de esa manera. El 14 de abril de 1999 se renombró como Población Cardenal Raúl Silva Henríquez”.

Junto a esto, el mismo sitio aseguró que desde “la Puerta Norte de Chile aseguran que la mayoría de los ariqueños siguen llamando ‘La Once’ al enclave. Ese el nombre que se quedó definitivamente en el consciente colectivo”.