Son los minutos más impactantes de la TV argentina. Un conductor de noticias denunció, en vivo, su cruda verdad de abusos sexuales por parte de su padre y su tío.

Juan Pedro Aleart, del espacio De 12 a 14, decidió usar unos minutos de su programa para dar cuenta de su compleja historia de vida.

Y ahí confesó una serie de situaciones que dejaron en shock a los televidentes, y que fueron un desahogo de años de sufrimiento familiar.

“Mi padre ha sido violento en todas las formas. Físicamente, psicológicamente y emocionalmente. Nos ha aterrorizado a todos los integrantes de mi familia”, comenzó diciendo en un impactante relato.

La dura historia de conductor de la TV Argentina

Así, Juan Pedro indicó que su padre había abusado a su hermana desde los 3 años, siendo VIH positivo. “Cada vez que se lo encontraba, ella temblaba de miedo”, reveló.

Y agregó que hace un año decidieron denunciarlo. “Mi padre fue notificado de esta denuncia penal hace tres semanas. Y al no querer enfrentar todo lo que había hecho, la atrocidad que había cometido, decidió quitarse la vida”, expresó.

Sin embargo, las atrocidades no se detuvieron ahí, ya que Juan Pedro develó que, mientras su hermana pasaba por esto, un tío de confianza comenzó a abusar de él y su hermano.

“Se aprovechó del contexto de vulnerabilidad extrema en el que estaba yo y abusó sexualmente de mí y de mi hermano desde los seis años en adelante”, señaló.

Un hecho que también denunció, llevándose un portazo de la justicia, ya que le dijeron que no podían hacer más contra este sujeto porque el caso había prescrito.

“Como víctima, le pido a todas las organizaciones, espacios políticos, jueces, este presidente y todos los que vengan, que trabajen de verdad para terminar con esta mierda de la prescripción en los casos de abuso sexual infantil”, sostuvo.

Finalmente, el conductor de TV envió un mensaje: “Les quiero hablar a los hombres que están del otro lado de la pantalla y fueron víctimas de abuso sexual. Yo sé lo que se siente. Es denigrante, vergonzante. Muchos no se lo han contado a sus esposas, a sus amigos, a sus hijos ni a sus psicólogos. Les quiero decir que el único camino para sanar es ponerlo en palabras. Hablarlo, denunciarlo. El silencio es el mejor amigo de los abusadores. Hablen, busquen ayuda, anímense”.