Israel da muerte a grupo de voluntarios de la organización World Central Kitchen

Franja de Gaza en Palestina

Una nueva tragedia se registró en la Franja de Gaza en Palestina por los bombardeos de las fuerzas de Israel. Un nuevo ataque militar israelí ahora causó la muerte de un grupo de voluntarios de la organización no gubernamental World Central Kitchen. La agrupación se enfoca en la preparación de alimentos en zonas de conflicto, y en búsqueda de ese objetivo fueron asesinados cuatro integrantes y el chofer que los trasladaba por el enclave palestino. El promotor de la ONG, el chef español José Andrés, denunció la muerte del grupo de personas en ese territorio de Palestina.

José Andrés expresó que “World Central Kitchen ha perdido a varios de nuestros hermanos y hermanas en un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa de Israel en Gaza”. El chef español agregó que “estoy desconsolado y afligido por sus familias y amigos y toda nuestra familia WCK. Estas son personas, ángeles, con los que serví en Ucrania, Gaza, Turquía, Marruecos, Bahamas, Indonesia”. Desde el enclave palestino se difundieron las trágicas imágenes de los cadáveres, pero también de los documentos personales que comprobaban las identidades de las víctimas.

El chef hispano apuntó directamente a las autoridades del país agresor y dijo que “el gobierno israelí debe poner fin a esta matanza indiscriminada”. El filántropo europeo recalcó que el ejecutivo de Tel Aviv “tiene que dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar a civiles y cooperantes y dejar de utilizar los alimentos como arma”. José Andrés enfatizó que “no más pérdidas de vidas inocentes. La paz comienza con nuestra humanidad compartida”.

El País informó que los cuerpos de las víctimas fatales fueron trasladados al Hospital de los Mártires de Al Aqsa, en la zona central de la Franja de Gaza. Los voluntarios de World Central Kitchen llevaban equipos de protección con el logo de la ONG y sus papeles de identificación. Desde el enclave palestino detallaron que fueron reconocidos los pasaportes de un australiano, un británico y un polaco, mientras que el cuarto voluntario asesinado era irlandés.