Expertos de la ONU denuncian el aumento de violaciones a los derechos humanos en Nicaragua
El titular del grupo de investigadores de las Naciones Unidas, Jan Simon, manifestó que Daniel Ortega y Rosario Murillo “deben rendir cuentas ante la comunidad internacional”.
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, durante su visita a La Habana en Cuba para ser parte del foro G77+China. / ADALBERTO ROQUE
Nueva York de EEUU
Un equipo de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó de la situación que enfrentan los habitantes de Nicaragua. Los investigadores expusieron un alza en las violaciones a los derechos humanos en ese país centroamericano, en especial por la represión de las voces opositoras, y responsabilizaron a sus dos máximos gobernantes. El grupo de analistas planteó que el presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo deberán “rendir cuentas” ante la comunidad internacional.
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El presidente del equipo de expertos, Jan Simon, expresó que Ortega y Murillo “deben rendir cuentas ante la comunidad internacional”. El informe de los investigadores detalla que el régimen en Nicaragua consiguió eliminar casi todas las voces críticas u opositoras en ese país. El titular del grupo de la ONU expresó que las fuerzas de seguridad ejecutan ese plan a través de “abusos y crímenes”. El texto detalla que “la persecución de personas opositoras o percibidas como tales se ha vuelto más sutil”.
El informe del Grupo de Derechos Humanos sobre Nicaragua da cuenta de una política para “eliminar todas las voces críticas y disuadir, a largo plazo, cualquier nueva organización e iniciativa de movilización social”. Los expertos aseveran que ese plan se enfoca en estudiantes, pueblos originarios y miembros de la Iglesia católica y de otros grupos religiosos. El grupo enfatiza que la persecución va más allá de las fronteras de Nicaragua, luego que a algunas personas se les privara de nacionalidad y de documentos oficiales.
La experta de la ONU, Ángela Buitrago, manifestó que las acciones del régimen de Ortega y Murillo también alcanzan a los menores de edad. La investigadora dijo que “los niños y niñas han sido violentados debido a su relación parental o a las actividades u opiniones expresadas por sus padres o familiares. Las deportaciones y prohibiciones de ingreso a Nicaragua les han separado de sus padres”. Deutsche Welle indica que el informe expone que la pareja de gobernantes aumentó su control en los tres poderes del Estado.
Oficiales de la Policía de Nicaragua resguardan un festival religioso en los alrededores de la capital Managua. / OSWALDO RIVAS
