Salud mental en Ciudadano ADN: ¿Cómo evitar un bajón emocional post vacaciones?

Las vacaciones están casi llegando a su fin para varias personas. Es por eso que en el Ciudadano ADN conversamos con Pablo Cea, investigador del Instituto de Bienestar Socioemocional de la Universidad del Desarrollo, quien nos explicó cómo enfrentarnos al retorno de las actividades.

“Esto es terrible”, comentó al inicio de la conversación el doctor en psicología, quien planteó que en la sociedad “tenemos una cultura de desequilibrios extremos que están en nuestro ADN y que finalmente nos obligan a adaptaciones que nos producen ansiedad”.

“El mundo de las vacaciones, del trabajo y del colegio son bastante opuestos y nos obligan a estas adaptaciones. La pega como golpe, cumplir obligaciones como las ligas que nos amarran”, expresó.

Una cultura de extremos

De acuerdo al profesional de la salud mental, los efectos positivos del descanso “se desvanecen entre una y tres semanas”. “Dura poquito, pero sí hay factores que lo ayudan a mantener”, aseguró.

Siguiendo con su reflexión, el investigador del Instituto de Bienestar Socioemocional de la Universidad del Desarrollo planteó que la percepción actual del trabajo tiene su origen en un instrumento antiguo de tortura, llamado tripalium.

“La forma del trabajo de sentarnos en una oficina encerraditos, tienen origen en todo este período de desequilibrio y de adaptación a una nueva forma de trabajo a la que todavía no nos acomodamos bien y que nos hace tener período de intenso trabajo y de intenso descanso y de intenso descanso, como las vacaciones”, señaló.

“Tenemos una cultura de extremos instalada y que nos obliga a estas adaptaciones. Ahora, bienvenidas las vacaciones porque nos hacen bien, pero ahora, hay que tratar de no perder el efecto”, añadió.

¿Cómo evitar tener un bajón emocional post vacaciones?

De acuerdo a Pablo Cea, “hay un montón de investigaciones, que indican que todo esto apunta a una reconexión con uno mismo, con los ritmos del cuerpo, con los intereses y con lo que se hace”.

“Todas las pautas que cambiaste y que te vienen bien, de alimentación, por ejemplo, las puedes ver cómo capturar o mantener. Ahora, hay que tener cuidado ahí porque como somos de extremos, a veces nos vamos de parranda en vacaciones y reproducimos esta cultura de carnaval”, aconsejó el psicólogo.

En línea con lo anterior, Cea dijo que hay que tener ojo con el ritmo de sueño adquirido en vacaciones, y fijarse si es que este fue positivo o no. Además, planteó que hay que fijarse en el nivel de actividad física.

“Las vacaciones activas o sedentarias hacen igual de bien. Las activas te renuevan y refrescan y las sedentarias te ayudan a la sanación”, agregó.