Este miércoles, funcionarios de la municipalidad de Santiago, junto a personal de Carabineros, llevaron a cabo un nuevo desalojo de una vivienda ocupada ilegalmenteen la comuna, la que estaba asociada a delitos e incivilidades.
Este inmueble, que es el desalojo número 33 de las 89 viviendas en esta situación que la administración de la alcaldesa Irací Hassler ha identificado en el territorio, se ubica en calle Martínez de Rozas 2821, a pocas cuadras de la vivienda del Presidente Gabriel Boric, en barrio Yungay.
El lugar llegaron dos camiones municipales para hacer retiro de los enseres de los ocupantes. Al momento de concretar el desalojo había cuatro ciudadanos de nacionalidad peruana en situación irregular, los que fueron llevados a la comisaría más cercana para que realicen el proceso de autodenuncia y de ahí, quedar en libertad. El resto de los ocupantes, que fueron notificados del procedimiento días antes, fueron a casas de familiares.
Vecinos habían denunciado los delitos de los que dio cuenta en el sitio el jefe de operaciones deSantiago, Marcos Pereira: “Hay ruidos molestos, venta de drogas. Era súper importante era desalojar para mejorar el barrio. Había un escenario y una barra al interior, todo para preparar una discoteca”. A ello se sumó que carabineros confiscaron casi 200 botellas de cervezas, parlantes y luces.
Una vecina del lugar señaló a los micrófonos de ADN: ““Ojalá no se vuelvan a tomar las casas, porque ya estamos hartos de esto: las peleas, la bulla, los disparos, horrible”.
A principios de este mes había sido desalojada otra vivienda colindante a esta, la que también era usada como discoteca clandestina. Tras ello, los funcionarios municipales la habían sellado, además de haber instalado cámaras de televigilancia. Pero antisociales la reabrieron, sacando incluso las cámaras.
Con todo, este último inmueble había sido ocupado desde 2021.
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