No volvió a utilizar la picota: uno de los 33 mineros pide dinero afuera de un mall en la región de Valparaíso

Samuel Dionisio Ávalos Acuña, conocido por ser el vigésimo segundo rescatado de la mina San José en 2010, encontró un nuevo propósito en las afueras del mall de la comuna de La Calera. A sus 56 años, se le puede ver ayudando a las personas que comparten materiales, cargando fletes o acompañándolas al transporte público, todo a cambio de una propina.

Además, quien fue uno de los 33 mineros rescatados, también ofrece asistencia a los automovilistas para salir del estacionamiento, siempre a la espera de una recompensa monetaria, según consignó La Estrella de Valparaíso.

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Este cambio en la vida del ex minero contrasta con su pasado en los piques, y según vecinos del sector, parece estar vinculado a problemas relacionados con el consumo de drogas. Testigos afirman que Ávalos llegó a la ciudad del cemento en 2019, en una época en la que su principal fuente de ingresos era la venta de música en el centro de la comuna. Su motivación era mantener la casa de sus padres, ubicada en la población Manuel Rodríguez.

Es común verlo en mall de La Calera

La transformación en la vida de Ávalos ha llevado a que se convierta en una figura habitual en las cercanías del mall, ofreciendo sus servicios de ayuda a cambio de propinas. Su presencia, sin embargo, ha suscitado comentarios sobre su posible vinculación con el consumo de drogas, algo que algunos vecinos señalan como evidente.

El ex minero, rescatado en un evento que capturó la atención mundial en 2010, parece haber encontrado una rutina diferente en La Calera. Lejos de las profundidades de la mina San José, se ha adaptado a un papel que implica asistir a los transeúntes y automovilistas en las inmediaciones del centro comercial. La obtención de propinas se ha convertido en una forma de sostén para Ávalos, en reemplazo de la picota.

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